“Si de vez en cuando dudas de ti mismo, debes saber que perteneces a la categoría correcta.”

Emilie Wapnik

A los 40 años finalmente descubrí lo que quiero ser cuando sea grande.

A cuantos de nosotros nos hicieron al menos una vez de chicos la fatídica pregunta "¿qué querés ser cuando seas grande?". Cuando llegó mi turno, esta pregunta me tomó totalmente de sorpresa y, muy vacilante, di respuestas como: “Mm… ¿quizás veterinaria? ¡No! ¡Arqueóloga!". Al crecer, mi confusión no desaparecía, me encantaba hacer muchas cosas, ¿por qué tenía que elegir?

Así que, con moderada decisión, decidí seguir los pasos de mi madre y me inscribí en psicología. Me gustó la idea, pero después de los primeros exámenes me di cuenta de que no era para mí y, siguiendo el consejo de mis padres, me pasé a ingeniería. ¿Y sabes qué? ¡Realmente me gustó! Sin embargo, mis intereses no solo incluían cálculos complejos y argumentos estrictamente científicos. La verdadera pregunta era… ¿por qué me gustaban tantas cosas sin poder elegir una? ¿No tenemos todos un “verdadero llamado” en un momento u otro?

A esa altura de mi vida llevaba más de 15 años jugando voleibol y esto me permitió obtener una beca y completar mi carrera de ingeniería en los Estados Unidos con una beca deportiva. Lo que no sabía era que yo era lo que Emily Wapnik llama "multipotencial". Una persona que tiene una amplia gama de intereses y es capaz de seguir con éxito una variedad de carreras a lo largo de los años. A veces esto puede ser un poco confuso, pero es algo bueno, ¡créeme! No solo era una multipotencial, sino que era una "en alternancia", ya que estudiaba y jugaba voleibol al mismo tiempo (estudiante-deportista).

Después de la universidad, mis intereses y deseos de variedad me hicieron cambiar nuevamente. El patrón de referencia ya no era el "modelo alterno", sino lo que Wapnik llama el "abrazo grupal". En otras palabras, elegí un camino donde confluyen todos mis intereses y fundé Sportlinx360, una combinación perfecta de emprendimiento y deporte, que me permite ayudar a muchas personas a realizar el deporte que aman y seguir estudiando una carrera universitaria.

Aunque fundé mi empresa, como multipotencial, estoy en constante evolución y después de 12 años en el campo empresarial/deportivo, sentí la necesidad de enfrentar nuevos desafíos. Con estos conceptos en mente volví al modelo de alternancia, pero esta vez en diferentes áreas: mientras llevo adelante las tareas de Sportlinx360 empecé también a dar clases en la universidad comenzando con cursos de gestión deportiva y luego volviendo a mi primera pasión: la matemática.

A medida que pasa el tiempo, continuo a evidenciar todos los aspectos positivos de ser multipotencial, como la búsqueda de la variedad, la necesidad de enfrentar nuevos desafíos y la curiosidad. Esta sensación de poder ser lo que quiero ser me da la tranquilidad de saber que, pase lo que pase, mis muchos intereses y diversas capacidades enriquecerán mis actividades de hoy y me ayudarán a identificar lo que el futuro me tiene reservado.

¿Y vos? ¿Qué querés ser cuando seas grande?